Por Halloween ¿truco o trato?

MI PEQUEÑA HISTORIA
En casa el día de Halloween coincide con el cumpleaños de mi hijo mayor.
¡FELICIDADES DIEGO!
Así que además de una comida un poco especial y su correspondiente tarta, había que hacer algo que asustara un poco.
Seguro que por la presión de la televisión cuando mis hijos eran pequeños teníamos que disfrazarlos y se iban a pedir caramelos por las casas del barrio, en general con muy poco éxito y con gran extrañeza de muchos vecinos que no podían entender que esa fiesta americana tuviera algún éxito por aquí. En cualquier caso, poco a poco, se va instando en nuestras vidas y ya es normal ver niños disfrazados que piden caramelos por el pueblo.
Este día hemos pasado muy buenos ratos haciendo recetas terroríficas y una de las que se llevaba la palma eran los “dedos de bruja”.
Me gustaba, y me sigue gustando, hacerlos porque lo niños pueden participar en su elaboración, para ellos es como trabajar con plastilina, les encanta pasar un buen rato en la cocina con mamá y papá, del que guardareis grandes recuerdos. Yo creo que son maravillosos momentos para compartir.
Como salen bastantes galletas, dedos, nosotros las usamos para darles a los niños que pasan por casa con el ¿truco o trato?, les alucina y son mucho mejores que las chuches.
INGREDIENTES

Para 40 dedos aproximadamente
425 gr de harina
200 gr de mantequilla
150 gr de azúcar
1 huevo tamaño L
1 cucharadita rasa de levadura química
½ cucharadita de sal
1 cucharadita de esencia de vainilla
Ralladura de un limón
45 almendras crudas
Opcional canela o esencia de almendra
Mermelada de frutos del bosque
ELABORACIÓN
Los dedos que voy a presentar serían de una bruja de raza blanca, pero los podemos teñir al color que nos guste utilizando un tinte alimenticio, pero hay que tener el cuidado de utilizar un tinte en gel, ya que si se utiliza uno líquido se aguará la masa y los dedos no saldrán.
Lo primero es verter en el bol de una procesadora la mantequilla y el azúcar, ponerla a una velocidad alta y batir durante 5 minutos, en el caso de que no tengas procesador la batidora con varillas servirá y en última instancia se podría hacer brazo batiendo a mano, te ahorrarás el gimnasio.

Añadir al bol la vainilla, la ralladura de limón y el huevo ligeramente batido dejando que continúe mezclando durante un minuto.
En otro bol mezclar la harina con la sal y la levadura.
Añadir a la mezcla de la mantequilla, que estaba batiendo, la mezcla de la harina en tres golpes, bajando la velocidad de la máquina de procesar o la batidora.

No deberemos de batir mucho, solo hasta que la mezcla esté integrada.

Sacar la mezcla del bol y ponerla en una mesa, proceder a amasarla a mano un poco, la mezcla no tiene que pegarse en las manos, en el caso de que se pegue se añade un poco de harina.

Aplastar la masa y hacer una torta de unos dos centímetros de alta.

Dividirla por la mitad y envolver cada parte en un film de cocina; meter ambas mitades al frigorífico por espacio de unas 2-3 horas para que la mantequilla endurezca.

Pasado el tiempo de enfriamiento precalentar el horno a 180º con calor arriba y abajo.
Cubrir una bandeja de horno con papel sulfurizado, con la cantidad de masa que se ha hecho hay género para dos bandejas.
Sacar una de las mitades de masa del frigorífico e ir cortando porciones de aproximadamente 25 gr más o menos como una cucharada sopera, dependiendo de la cantidad que se corte los dedos saldrán un poco más grandes o más pequeños, pero tiene poca importancia siempre que tengas almendras suficientes.

Rodándola sobre la mesa hacer cilindros, no tiene que ser perfectos.

Con dos dedos hacer los nudillos tal como se puede ver en la fotografía.


Aplanar un poco uno de los extremos y colocar una almendra a modo de uña. El otro extremo se recorta un poco.

Con un cuchillo hacer unos cortes para asemejar las arruguitas de los nudillos.

Ir colocando los dedos en la bandeja del horno y cuando esté completa la introducimos en el frigorífico 15 minutos, para que se endurezcan un poco.

Transcurridos los 15 minutos pasar la bandeja del frigo directamente al horno donde permanecerán unos 12 minutos, hay que ver que estén doraditos. Como siempre cada uno debe controlar su horno, cada uno es diferente, así que hasta que lo controléis bien no queda más remedio que vigilar.

Actuar de igual manera con el resto de la masa.
Cuando se saquen del horno hay que pasarlas a una rejilla para que se enfríen sin sudar.

Ahora toca decorar, con un pincel, en la zona de la uña y en el otro extremo, poner un poco de mermelada que deberá ser de color rojizo se puede usar de fresa, de arándanos, de frutos del bosque, ....

Dejar enfriar del todo y listas para repartir a los niños.

Comments